SIGUIENDO LOS PASOS DE SHERLOCK...

SIGUIENDO LOS PASOS DE SHERLOCK…

Alexandra Lozano Gil

Exposición de Bernardí Roig. El Coleccionista de obsesiones.

Museo Lázaro Galdiano. 25 enero al 20 mayo 2013

 

La exposición de nombre el coleccionista de obsesiones se encuentra en el recinto de la Fundación Lázaro Galdiano en Madrid.

Una de las esculturas que forma el conjunto se puede ver desde la calle como un reclamo al espectador. El conjunto de la obra consta de diecisiete obras, compuesta por esculturas de personas de tamaño natural, las cuales realizadas en moldes de personas reales y con las mismas características que obsesionan al artista, estas son: calvos, con gestos inquietantes y con los ojos cerrados, gordos, están descalzos, son blancas y únicamente vestidos por unos pantalones desabrochados que están cayéndose; esculturas de pequeño tamaño de plata, collage, audiovisuales y cuadros.

Con todo esto Bernardi Roig intenta integrar las obras en espacios inusuales, donde la propia fundación no lo utiliza para exponer sus obras de arte antiguo, de estos lugares podría destacar el almacén; crea nuevos puntos de mira para su visualización y con ello crea un ambiente de tensión e inquietud en una situación de búsqueda continua, ya que esconde las obras para causar mayor sensación al visitante.

En cambio en el audiovisual que contemplamos en la sala de la primera planta, es en blanco y negro; como fondo tenemos la música de Elvis Presley con su canción Are you lonesome tonight? -¿estás sola y triste esta noche?-, pero solo en algunas partes, esto hace que cree un estado de intranquilidad al espectador. El video reproduce un paseo por el museo por la noche con el artista caracterizado y siendo un foco de luz que ilumina en cada paso el museo, en este recorrido el artista lleva los ojos tapados con cinta aislante negra.

Es interesante ver que en la fundación, donde la colección es de arte antiguo se introduzcan entre ellas obra arte del siglo XX, esto es bueno, ya que es una nueva forma de trabajo, que hace que los visitantes no esperen encontrarse este tipo de obras contemporáneas, y hagan que se sorprendan y las observen desde una nueva perspectiva.

He de destacar que se abre un discurso, una relación entre el edificio y el exterior a través de la escultura que se encuentra en el balcón del segundo piso. Con esto se abre una innovación en donde la persiana y el estor se encuentran recogidos dejando entrar la luz, que se desliza por las obras dándolas un nueva iluminación, esto no es muy usual dentro de las normas generales de los museos.

Esta exposición se realizó en Bruselas, con la misma forma expuesta que en la fundación. Esto causo mucha sensación entre los transeúntes que caminaban por el parque. Esta idea comenzó a través de la película Blow up, donde un fotógrafo realiza una sucesión de fotos que se desarrolla en un espacio abierto, donde se descubrió un asesinato en la sucesión de los fotogramas. La exposición en la Fundación quiere causar o representar la misma sensación. Aunque se han estrenado específicamente ocho obras para esta la exposición de Madrid. Es un intento de seguir las pistas hasta encontrar el cadáver, al modo que podría hacerlo el personaje de Conal Doyle, Sherlock Holmes.

Otro interés que tiene el artista es atesorar el arte y que cada obra se exprese por sí sola, aunque coloca obras que puedan ayudar su relación y expresión. Para poder entenderlo implica al espectador un nivel alto de sensibilidad. Es una exposición que trae un aire fresco dentro de las obras del siglo XX y de los espacios que ocupan.

Para concluir la exposición, está se completa por un catálogo de 156 páginas en blanco y negro; en donde encontramos textos de José Jiménez –comisario de la exposición- y de Vesela Stretenovic, también se recoge la conversación entre la periodista Yuriko Takahashi con el artista.