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Exposición “Sin Título” de Jorge Perianes

Galería Max Estrella, c/Sto. Tomé, 6

31 de enero a 6 de abril, 2013

Max Estrella nos presenta la exposición de Jorge Perianes, artista gallego que había colaborado con anterioridad en la galería formando parte de la exposición colectiva Caminar la línea, dónde junto a artistas como Alejando Almanza y André Komatsu realizó un estudio del equilibrio y de sus diferentes formas, y que por fin lo hace de forma individual en esta muestra. El artista ya había expuesto con anterioridad en Madrid, individualmente en el Matadero en 2011 con Abierto x obras o en Alcalá 31 en una exposición colectiva llamada Esculturismo, entre otras. La visión claramente antropológica de Perianes hace que toda su obra gire en torno a este hecho, y que sea un reflejo constante de sus propias reflexiones acerca de fundamentos como la identidad o la naturaleza, centrándose en aspectos cotidianos que preocupan y atormentan al ser humano, o sobre los que reflexiona de forma constante durante toda su vida.

Al entrar en el espacio de la galería somos recibidos por grandes masas aparentemente de piedra ( en realidad, de cartón) sustentadas en los ángulos del techo de forma precaria ,escapando de toda ley física ,y creando en el espectador una automática sensación de inseguridad y fragilidad , conseguida al incluir elementos extraños directamente de la “naturaleza”, e introducirlos en un espacio en el que desentonan, rompiendo de esta manera con la armonía del lugar , y desconcertando de esta forma al espectador.

El artista juega con la atracción estética y visual que ejercen sus obras sobre el espectador, jugando con él y atrayéndole hacia ellas, para que una vez cerca, éste descubra el significado oculto o no,  a veces cargado de ironía y otras veces de melancolía, que se esconde tras las gotas que cubren un espejo o en sus pedazos rotos y esparcidos por el suelo. La simbología y a su vez la ambigüedad  son parte esencial de su obra, ejemplificada perfectamente en sus escaleras, presentes anteriormente dentro de 7+1 Project rooms  de MARCO o en el MUSAC dentro de Existencias, punto común de muchas de sus exposiciones y las cuales como las de Escher parecen infinitas o no llevan a ninguna parte, simbolizando la mentalidad del propio ser humano y su vacío existencial. Según él,  la utilización de elementos cotidianos como forma de expresión artística que ya vimos con Duchamp y que posteriormente artistas como Joseph Kosuth han mantenido, adquiere aquí una nueva transcendencia. 

Su obra está plagada de metáforas y de dobles significados, como vemos en sus copas tintadas de rojo que colocadas de un modo concreto, podríamos confundirlas con un reloj de arena que marca el tiempo que nos queda, o que cargan con el peso de otro cuerpo colocado entremedias, como las cargas que un matrimonio con hijos acarrea durante toda su vida, ejerciendo de pilares sobre los que se sostiene el resto de la familia. También encontramos obras como imágenes de playas dónde la verdadera naturaleza ha “salido” directamente del cuadro y es palpable, o pinturas dónde pequeñas marcas o agujeros nos dejan vislumbrar parte de lo representado, que parece casi “encerrado “ por la pintura, al igual que los brotes jóvenes y nuevos que luchan por salir al exterior por las pequeñas grietas en forma de cuadrado trazado en la pared. El artista primero plasma sus ideas en dibujos y apuntes para después darles forma material en esculturas de diferentes materiales, ya que para el las esculturas “no representan, crean una entidad nueva, animan el objeto, tienen alma y pueden ser manipulables”.