Café de Di, Wilfredo Prieto
Galería Nogueras Blanchart
Andrea Huerta de la Zarza
DIBUJANDO OBSESIONES:
La galería Nogueras Blanchart,
presenta, la primera exposición de dibujos, del artista cubano Wilfredo Prieto,
reconocido principalmente por sus instalaciones, objetos y performances, tras
varias exposiciones de este ya realizadas, en la ya dicha galería, presenta
esta nueva muestra, que ya deja atrás a la primera que hizo en España, en la que presento su primer
proyecto hecho fuera de Cuba, en la que trasformo el espacio, en una biblioteca,
con 6000 libros vacios, colocados en estanterías tradicionales de madera, que acentúan
los temas de la censura, el conocimiento y la educación y que realzan el
vacio de las palabras y denuncian la
pobreza y la imposibilidad del estudio de las clases más bajas.
Otra de las exposiciones, y la
quinta en España, fue la llamada “piedra
iluminada y piedra sin tallar”, en la que presenta una serie de paradojas
entre los títulos y las obras, y por otro lado representa títulos de refranes,
en esta intenta reducir las posibilidades interpretativas, y como en la
anterior intenta contraponer al espectador contra la educación. El punto de partida de esta exposición fue, la
obra realizada en 2006 “Grasa, jabón y plátano”, en la que también presenta
en un gran espacio, y que además resalta esa paradoja de obra y titulo, en la
que nos pone en los momentos previos a lo que viene al final, la caída.
La exposición que nos ocupa “café hecho por Di”, es una exposición en
la que se presentan una serie de dibujos individuales, de aspecto naíf, dibujos
sencillos y de talante minimalista, para después hacer una especie de mezcla entre ellos
creando un mural. Su producción de dibujos abarcan los proyectos desde sus años
de estudiante hasta su exposición más reciente, estos además siguen, en la línea
de sus anteriores producciones de esa idea sencilla entre titulo y obra, el crítico
cubano Gerardo Mosquera definirá su producción, como: idea neta-obra sencilla-significado máximo.
Estos dibujos presentan trazos
concisos y firmes, sobre bloc de notas, agendas o cuadernos, como los que todos
podemos tener, estos parecen dibujos que se hacen en las horas de aburrimiento,
como los que habitualmente realizamos en los márgenes de las hojas, mientras
estamos en clase o en reuniones, o los que hacemos en cualquier papel, mientras
hablamos por teléfono, esto nos lleva a ponernos en el lugar del artista y a entender,
un poco más, el significado de estos dibujos. Estos son en realidad bocetos
para sus obras más grandes, para sus exposiciones o bien por otro lado, bocetos de obras sin
realizar, o simplemente dibujos de cosas cotidianas, como la taza de café que
da nombre a la exposición, aparte también hay figuras que se reiteran, como la
serpiente que se muerde la cola, o uno de los dibujos que servirá para su obra “avalancha”,
el propio Wilfredo definirá, su obra como: El
papel es el primer espacio donde visualizo las ideas, las depuro, les doy
vueltas hasta que logro una imagen o idea que me convence.
Otro de los aspectos interesantes es, la disposición de las obras, estas se
presentan en un formato inusual, como si de una cámara de las maravillas se
tratara, con multitud de objetos por sus paredes, esto privilegia asociaciones
de tipo conceptual o espacio-temporales revelando una lectura muy personal del
artista respecto a su propio trabajo, y que por primera vez se expone, uno de
los dibujos más ambiciosos es el del mural que representa una carretera
infinita, en el que pone de manifiesto la frustración de los limites, que se puede
asociar con la limitación de los espacios en los que expone, que siempre tienen
límites tanto espaciales como intelectuales
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