viernes, 15 de febrero de 2013

Garabatos. Dibujos. Futuro. Arte.


Wilfredo Prieto
Un Café para Di

Galería Nogueras Blanchard

Sandra Godino Jiménez

La céntrica galería madrileña NoguerasBlanchard acoge la primera exposición en la que se hace y muestra por primera vez una determinada selección de la colección de dibujos del reputado artista cubano Wilfredo Prieto, nombrada Café hecho por Di. En esta muestra, de múltiples dibujos del artista, el espectador puede entretenerse y navegar entre decenas de obras expuestas situadas en las paredes de la galería. Éstas tienen una curiosa disposición en el espacio. Son muchas las expuestas, aunque no superan grandes dimensiones sino que son de pequeño y mediano formato, aumentando la sensación de horror vacui ante nuestros ojos. Y son tantas, repito, que cubren casi por completo las paredes que conforman la galería, pero con un determinado orden que tan solo el artista puede entender aparentemente ya que han sido colocadas por él. Se disponen muchas de ellas por parejas, de manera asimétrica aunque siempre guardando ese cierto minimalismo al que Prieto es tan fiel en sus trabajos artísticos, tanto en el dibujo como en la exposición en general. Por otra parte, los temas que abordan estos dibujos son diversos proyectos del artista desde sus inicios hasta la más reciente exposición. Algunos con éxito, otros frustrados y otros por realizar, ya sea por dificultades técnicas en la pieza o porque con el tiempo él mismo ve que no tiene apenas valor artístico. Y en concreto, los dibujos reflejan sus propias ideas, la captación particular de la realidad, las preparaciones para exposiciones, proyectos futuros, trabajos varios e incluso alguna imagen de lo cotidiano. Así, personalmente, la obra que concentra su mayor atención e interés por parte del artista y del visitante son un par de ellas en las que dibuja, por ejemplo, una carretera como símbolo de infinito añadiendo así un simbolismo concreto. Por lo tanto, estos dibujos, gráficos o preparaciones de sus trabajos artísticos tienen además de su función práctica una función simbólica e individual dentro de sí mismos.
Una vez visionado este mar de dibujos y pequeñas obras, una vez el público se despega, retira su atención de esa multitud de obras enmarcadas y dispuestas, sin orden lógico aparente, en tres de las paredes de la galería se sumerge en una gran contradicción respecto a estos dibujos centrándose justo en otra obra de la galería. En el lado contrario, un gran lienzo, una especie de cartulina de grandes dimensiones nos adentra en otro espacio al parecer completamente distinto pero a la vez siguiendo la línea y dialogando entre las demás obras. Engloba también en ésta algunos de los proyectos de obras para una exposición que se organizaba en Nueva York. Una especie de gran libreta de anotaciones, diario artístico y personal pero dispuesto a compartir, de la misma manera que nos sugiere en los dibujos individuales. Revelando así una actitud artística, personal y una forma de trabajar particular, la cual, es considerada un verdadero arte. Estos bocetos y dibujos preparativos los sitúan y los coloca en esta galería haciendo de ellos un conjunto, un todo formando una breve pero intensa exposición de aquello que capta de la realidad, aquella idea que pretende plasmar posteriormente en obras de arte. 
Cabe destacar, por otra parte, la presencia del dibujo que da el título a esta exposición, Café hecho por Di. Siendo un dibujo minimalista, sencillo, en el que se representa una simple taza de café con tan solo algunos trazos sueltos sobre el papel, el cual, transmite, quizás, ese aspecto de cotidianidad y aspecto más emocional si cabe del artista. 

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