Pequeño Fausto

Wilfredo Prieto: Café hecho por Di      
Galería Nogueras Blanchard, Madrid.
2 de febrero al 30 de marzo de 2013


Mariana Cancela Moreira Leite

A la primera impresión, y sobre  todo si uno está acostumbrado a sus instalaciones (a veces tan enormes y poéticas, otras capaces concentrar en pequeños artefactos grandes dosis de humor e ingenio) esta exposición puede remitirnos a una viñeta de Pablo Helguera en la que una pareja, de visita por una feria de arte discurre: “¿Cual galería crees que deberíamos mirar antes: la que tiene los mejores trabajos de los peores artistas o la que tiene los peores trabajos de los mejores artistas?”. El reclamo es seductor – Nogueras Blanchard presenta la primera exposición con los dibujos de Wilfredo Prieto… Y aún más si tenemos en cuenta cómo desde el Renacimiento, cuándo Alberti declaró el dibujo como “padre de todas las artes”, una áurea místico-sublime rodea esa forma de expresión artística. Así, cada conjunto de trazos significativos bosquejados por las manos de Prieto lleva su moldura, y cada pequeña obra nacida de este proceso de enmarcación es cuidadosamente colocada en apretados espacios que llenan las paredes de la galería recordándonos aquellos modos perdidos de exposición de los salones decimonónicos o de las wunderkammer. Una gran franja de papel blanco, plagada de pequeñas y grandes figuras (algunas se hermanan con las convertidas en cuadritos) recorre una de las paredes.

La galería se convierte de esa forma en su taller, y como ya reivindicaba Courbet hace casi dos siglos, el taller del artista se convierte en obra. Así, volviendo al humor de Helguera, rectifico el guiño y acepto la invitación de participar en el proceso creativo del artista. Las notas rápidas, los bocetos, no pueden ser buenos o malos. No fueron concebidos para serlo. Son expresiones inmediatas de impresiones de la vida, embriones de lo que serán obras, llevadas a cabo o non-natas, proyectos como ruinas. Son sus vergüenzas y sus orgullos.

Es imposible establecer ejes temáticos o conexiones lógicas: son la expresión sobre papel de conexiones cerebrales, de preocupaciones y sentimientos acumulados al largo de una trayectoria que remonta a sus años de formación en Cuba. Encontramos desde un kitsch hibiscus rodeado de verdes palmeritas (que he tenido la suerte de escuchar de la boca de artista que se trata de una de sus favoritas, lo que corrobora la enorme dificultad de adjudicar cualquier juicio crítico a creaciones concebidas para uno mismo) hasta la primerísima fase de lo que llegarían a ser célebres obras suyas, pasando por esbozos esquemáticos de rollos de papel higiénicos a la simbólica carretera cuyas curvas dibujan el infinito. Percibimos las oscilaciones dignas de Fausto, y a la vez tan humanas y universales, entre un compromiso absoluto un enajenamientos placentero.

No podemos esperar dibujos minuciosos, impactantes a lo da Vinci. Están concebidos para transformarse en obras de una conceptualidad ingeniosa y sutil, hincadas en el humor, que pierden mucho la fuerza sobre el papel. Probablemente, además, la idea de una exhibición basada en su cuaderno de bitácora haya sido concebida por la falta de otro tipo de obra. Sin embargo, esta retrospectiva, nos permite disfrutar de la poesía con la que Prieto percibe la realidad, quien para él es su única fuente de inspiración. Es un artista que no busca un estilo, una marca propia, sino que simplemente, y de una manera autónoma, aspira a mostrar la belleza que él encuentra en ciertas cosas, en ciertos objetos, muchas veces más que cotidianos, en un atisbo del arte povera. En un movimiento casi utópico, proveniente de su afección al Aikido, afirma desear reverter las malignas fuerzas del mercado en pro del arte. Seguramente la muestra también le permita experimentar un viaje interno, un encuentro productivo con él mismo. Le permita retomar el contacto con ese elemento fresco e informal y, en un acto hermosamente egoísta de creación, mostrar todo eso al mundo beneficiándonos a todos. Además, claro, de lo mucho recaudado: ya se han vendido casi todas piezas.